miércoles, 28 de abril de 2021

ISABEL MUÑOZ

Isabel Muñoz nació en Barcelona en el año 1951, pero a los 20 años se mudó a Madrid. En el año 1979 entró en una escuela de fotografía para dedicarse profesionalmente a ello. Empezó trabajando por encargo en prensa y publicidad., también hizo fotografía para cine en esa época. Después, en 1982 se marchó a Nueva York para seguir estudiando. Su primera exposición fue en Madrid en el año 1986, a partir de ese momento empezó a viajar por el mundo, en uno de esos viajes, concretamente en Tailandia tuvo un accidente que le causo una rotura de vertebra, este incidente marcó sus forma de pensar desde ese momento, dado a que se dio cuenta de lo efímera que es la vida.

Lo que más me ha llamado la atención es la reflexión final que tienen las mujeres al ver las fotos que Isabel Muñoz les había traído, me refiero a cuando dicen que en realidad esas fotos no les sirven ni les servirán para nada, es un duro golpe de realidad que nos demuestra lo poco que podemos hacer, aunque nuestra intención sea buena y nos esforcemos mucho por ayudar o cambiar las cosas.

En esta imagen observamos a una mujer anciana en blanco y negro abrazando un hilo rojo con mucho "interés". El fondo de la foto es negro y la luz lateral.
Nada más verla esta fotografía me causó muchísimo rechazo, pero por algún motivo ya no es así, no entiendo porque pero la mujer de la foto me genera, en cierto modo, una sensación de ternura, supongo que se debe a estar viendo la representación de una persona poco estable psicológicamente.
En esta fotografía se observan a tres monos, uno de ellos es una cría y los otros dos están mirando a la izquierda, la fotografía es cuadrada y esta en blanco y negro.
Es curioso como me sorprendió el ver a dos animales que parecen estar posando, da la sensación de que Isabel Muñoz les pidió que miraran allí para sacar la foto, lo que la hace una fotografía especial e interesante.
En esta fotografía vemos a un bailarín negro con unos pantalones muy blancos y sin camiseta saltando al hacer un paso de baile casi saliéndose de la fotografía por arriba.
Elegí esta fotografía por la capacidad que tiene para transmitir una fortísima sensación de libertad con apenas dos elementos, el hombre y el fondo.
En esta fotografía vemos el primer plano de la cara de un hombre que lleva toda esta cubierta con pendientes, agujas y cuerdas, que entiendo forman parte de la indumentaria tradicional de alguna.
Esta foto me parece digna de ser mencionada porque ofrece un contraste brutal entre lo que parece que tendría que sufrir el protagonista por lo que lleva en la cara y la absoluta tranquilidad y calma con la que este está posando.


Mi fotografía inspirada en Isabel Muñoz